Carta a una joven que no quiere estar a la moda

Querida joven universitaria, confusa, triste y perdida,

Te cuento que tengo una familia con muchos problemas, pero unida y muy linda. Tengo un trabajo soñado por muchos (hasta por mí misma antes de llegar a conocer la realidad del mundo laboral). Tengo una pareja que daría todo por mí. Tengo las mismas amigas desde los tres años y somos inseparables, pero también hay una nube negra encima de mí que muchas veces me nubla la vista.

No tomo antidepresivos como tú, no sueño con morir una y otra vez, pero sí sé lo que es tenerlo todo y aun así sentir que la cama no me deja parar, que por momentos la nube se me viene encima, que las ganas de llorar son incontrolables y que el miedo y el estrés ahora parecen ser mi día a día. La ansiedad me da ganas de vomitar o gritar, o simplemente pausar la vida y no salir jamás.

Ambas sufrimos “sin razón alguna” o al menos eso nos dicen. Todavía recuerdo el mes que lloré casi a diario y después de hacerme muchas preguntas e intentar recordar mis creencias (el poder de la mente, el positivismo, lo importante que es cambiar las perspectivas, etc.), llamé a mi persona favorita en el mundo, mi tía Claudia, y le dije: “Necesito un psicólogo, me estoy perdiendo a mí misma”. Mientras decía esas palabras me sentí la joven más fuerte , estaba orgullosa de mí misma, pero llegó la respuesta que me derrumbó:¿Para qué un psicólogo?, ni que estuvieras loca, la vida es difícil para todos”.

Me quedé callada, lo repetí en mi mente.  

 
 
 

¿Estoy loca?

Sé que te dijeron lo mismo y no quiero que te sientas sola. Llamé a mi querida amiga Juliana Múnera. Como te dije, tengo las mismas amigas desde los tres años, por eso ella me conoce a la perfección. Para contarte de ella diré que es un poco perdida, aunque todos tengamos claro quién es, Juliana está conociéndose constantemente, experimentando, escarbando cada parte de su ser. 

Por ejemplo, comenzó diciendo que quería ser arquitecta (yo solo hice cara de ¿qué?), luego se fue a vivir a Australia, el sueño de muchos, y no, a diferencia de la mayoría, prefirió estar cerca de casa y volvió al país. Después, entró a estudiar Finanzas (nadie se lo creía), se enamoró de un hombre tóxico, algo que jamás creímos que iba a pasar en ella, pero luego terminó con él, conoció un gran amor, empezó a estudiar Psicología y hacer cursos de coaching. Ahora va en el séptimo semestre, su mirada es desde la perspectiva fenomenológica existencial, en palabras más claras: promueve la exploración del ser. 

Juliana es auténtica, honesta (antes pasaba por imprudente) y muy pero muy buena amiga, da los consejos que son, con empatía, sinceros y apoyados por su conocimiento de psicóloga y coach. Por eso, hoy la traigo conmigo en la escritura de esta carta.

Bueno, yo, Juliana, opino que todas las personas en la vida tienen algún sufrimiento, tú los tienes, María Antonia los tiene, claro que yo los tengo. Es normal. A veces puede ser un sufrimiento “agudo”, que es como de corto plazo o puede ser un sufrimiento “crónico”, que puede durar un poco más y que puede ser más difícil de sanar, pero con el tema de que “la depresión no existe, es una moda, todo está en la cabeza”, como se explica una de las negaciones de la enfermedad en el libro La depresión (no) existe, de Juan Carlos Rincón, considero que son premisas absolutistas. 

Es decir, que son absolutas y generalizadas. Hablar del dolor ajeno no puede ser así, como lo dije en un comienzo, el dolor parece ser innato al ser humano, se presenta en cualquier edad, momento o género. Este sufrimiento se puede escalar y llamarse depresión, la vulnerabilidad en la que está toda la humanidad no se puede denominar “moda”. Existe y se debe tratar, tenlo por seguro.

 

¡FAKE NEWS! Juan Carlos Rincón cuenta su testimonio y dice que estar ansioso o depresivo es como sufrir de migraña, se quita, crees que estás bien y vuelve como una explosión. Sé que te sientes terrible, te cuesta existir y con esa frase te hacen creer que es inventado. No es una moda, no es falta de carácter ni mucho menos un capricho. El Manual diagnóstico y estadístico de trastornos mentales lo señala como un trastorno serio. Investigando un poco más encontramos que Juliana ya había estudiado este documento en su tercer semestre de la universidad, exploramos el libro y encontramos los síntomas más presentes durante la depresión. Chulea tú los que sientes constantemente.

 

La Organización Mundial de la Salud (OMS) respalda lo que Juliana y yo te decimos, según un informe, la depresión es un trastorno mental frecuente, afecta a unas 280 millones de personas en el mundo. 

  •       He estado deprimido la mayor parte del día, casi todos los días, con sentimiento de tristeza, vacío y desesperanza.
  •       He experimentado disminución importante del interés o el placer por hacer actividades.
  •       He perdido peso sin hacer dieta o he aumentado de peso significativamente.  
  •       He sufrido insomnio.
  •       He sentido agitación.
  •       He sentido fatiga y pérdida de energía.
  •       He experimentado sentimientos de inutilidad o culpabilidad excesiva, también incapacidad.

Entonces, con respecto a la frasela depresión no existe”, yo, Juliana, considero que tú debes de explorarlo, no existe una prueba de sangre, un examen o una radiografía para confirmar esta enfermedad. Para mí es más que suficiente que no te quieras parar de la cama, que sientas que vas a morir en cualquier momento debido a la tristeza. Necesitas evaluar tus pensamientos negativos, buscar ayuda. Estás en todo tu derecho de pensar que tienes depresión o no, ambas son válidas, solo piensa con cuál frase te sientes más identificada: “tengo depresión” o “no tengo depresión”, ¿cómo te sientes con esas afirmaciones?

El Portal Psycom, del que habla el libro La depresión no existe, también lo señala: las personas que sufren de depresión como tú pueden llegar a sentir desinterés por las actividades que antes disfrutaban (pilas con eso) o hasta presentar síntomas físicos, como el dolor crónico o los problemas digestivos, o dímelo a mí, María Antonia, que cuando viví la tristeza más grande de mi vida comía y vomitaba o también como dicen las abuelas “tenía el estómago flojo”.

Según Juli Fraga, doctora de Psicología y escritora del portal web Healthline, la depresión es una enfermedad mental, pero varias investigaciones demuestran que puede tener efectos físicos, como la fatiga o niveles de energía bajos; disminución en la tolerancia de dolor; puede que todo, hasta el cólico menstrual, te duela más de lo habitual; dolor de espalda o dolor muscular; fuertes dolores de cabeza; disminución de la vista; dolor de estómago o malestar en el abdomen; de nuevo, problemas digestivos y horarios irregulares del intestino. Para finalizar con el tema de que puede ser dolor físico, un estudio publicado en el Journal of Affective Disorders indica que el 78 % de los pacientes que presentan ansiedad y depresión sienten algún dolor en su cuerpo.

Yo, Juliana, te puedo decir que no eres la única, con seguridad algunas veces sientes que no sirves para nada, que no es viable salir adelante o que de pronto personas como la tía de María Antonia tienen la razón.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) respalda lo que Juliana y yo te decimos, según un informe, la depresión es un trastorno mental frecuente, afecta a unas 280 millones de personas en el mundo. 

¿Sigues creyendo que es moda? Además, afecta más a las mujeres. Según la OMS, cada año se suicidan en el mundo cerca de 800 000 personas, y el suicidio es la segunda causa de muerte entre las personas de 15 a 29 años. En adición, según el DANE, en su encuesta Pulso Social de octubre de 2020, el 38,6 % de los encuestados señaló haber presentado sensaciones entre preocupación o nerviosismo, 20,6 % tristeza, 18,8 % dificultad para dormir, 18,1 % cansancio, 6,3 % dolores de cabeza o estomacales, 2,2% soledad y 10,6 % irritabilidad.

En 2020, la OMS  también indicó que la depresión le pasa a la gente de todas las condiciones sociales, en todos los países y de todas las edades… ¡ENTONCES NO, NO ES UNA MODA!

(Conoce la historia real de Gabriela Delgado una joven de 24 años que padece depresión y trastorno de la conducta alimenticia)

Si te tomaras el tiempo de leer el libro La depresión no existe de Juan Carlos Rincón y Cecilia Ramos entenderás que no estás sola…

Así como a ti y a mí nos han dicho palabras que jamás olvidaremos o que nos quitaron el sueño en las noches, es muy común menospreciar la tristeza y hacer juicios; por eso, Juan Carlos dedicó el texto a esos imaginarios repetitivos que nos atormentan. El libro es una guía para no causar daño, el indicado para los que hablan sin pensar, tienen prejuicios y no entienden por lo que estás viviendo. 

Si me preguntaran por la característica principal del quinto capítulo, me atrevería a decir que es el suicidio, pero hablando contigo, es lo último que quiero que se te pase por la cabeza, ya que según una psicóloga y mentora que tuve por dos años, María Virginia Álvarez,  a quien llamé para escribirte esta carta, hablar de suicidio puede “desbalancear tu estado de ánimo”.

Entonces para nosotras, María Antonia y Juliana, como lectoras del libro, María como paciente que sufre de ansiedad y Juliana como estudiante de Psicología, creemos que la característica principal del capítulo cinco es: “la depresión le pasa a todas las condiciones sociales, en todos los países y de todas partes” (pág. 78).

Conoce un último criterio, el psicólogo Felipe Agudelo, psiquiatra infantojuvenil, docente de pediatría de la Universidad de Manizales y consultor comunitario de salud mental, nos comparte unas palabras: “En términos estadísticos, la moda es el valor que aparece con más frecuencia en un conjunto de datos, en estos términos, la depresión sí está apareciendo cada vez más como triste dato que trae, detrás del número, una existencia en riesgo, espacios de vida perdidos, posibilidades invisibles y capacidades apagadas. Otra definición de moda es un gusto, costumbre o uso propio de un grupo en un tiempo y lugar determinados; relacionar la depresión con este sentido del término moda es un error y habla de serias dificultades en algunas familias, en personas, incluso en la sociedad para comprender que estamos enfrentados a una problemática biológica y social que cada vez se relaciona con más años perdidos por discapacidad en jóvenes: la primera, segunda y tercera causa de años perdidos por discapacidad en la mayoría de los países. Y esto requiere entonces gran sensibilidad en los entornos de la familia, en el vecindario, las escuelas, las universidades, las empresas, etc.”.

Para que juntas encontremos una solución la primera acción que debes tomar es créetela tú misma, acepta tu condición. Según la OMS, más del 90 % de las personas que padecen la enfermedad no reciben ningún tipo de ayuda. Nosotras queremos que seas la excepción, que algún día “deje de ser una excepción”, que el conocimiento sobre la salud mental se normalice, que tú, María Antonia y el resto de jóvenes que necesitan una ayuda, busquen apoyo profesional. Para facilitarte la vida, y empezar paso a paso sin agobiarte, te proponemos una check list que juntas construimos con el libro y la ayuda de María Virginia, psicóloga profesional, también ex directora del proyecto La Akademia Medellín, la misma que ya mencionamos antes.

  •       ¿Con qué frase te sientes más cómoda? ¿Más identificada? “Tengo depresión”, “No tengo depresión”.
  •       ¿Cómo te sientes cuando crees que tienes depresión y otras personas te invalidan tus sentimientos? Crea un grupo de Whatsapp con esa persona que te dijo que era una moda, sácala del grupo, así quedas tú sola como administradora y sin integrantes, manda una nota de voz de cómo te sientes pensando que sigue allí, se siente en la cabeza, en el pecho y el estómago. Haz una lista de tus síntomas y sentimientos.
  •       Evita seguir relacionándose con las personas que te clasifiquen, no eres una etiqueta, no estás en busca de modas. Intenta guardar distancia, rodéate de personas libres de estereotipos. Si no es posible, porque puede ser tu mismo círculo familiar, con quien vives, escribe una carta.
  •       Conoce las historias de los demás, de aquellos que han podido salir o que intentan salir, para esto existe un programa llamado La Akademia Medellín, las dos lo hemos intentado. Es un programa de educación emocional gratuita reconocida a nivel global, presente en España, México, Argentina, Brasil, Ecuador y Colombia. Se promueve la terapia en grupo con expertos y se incentivan los valores como el autoconocimiento, la responsabilidad, el bien común, la autoestima, la felicidad, el talento y el amor. En este link te puedes inscribir. 
  •       Pide una cita con un terapeuta, recorrer este camino con un experto es necesario. Agéndalo en tu calendario.

Juan Carlos Rincón lo dijo en algún momento: “ Tú eres tristeza, yo, María Antonia, soy ansiedad, y ambas vamos a salir adelante. 

Atenta - Mente

Un proyecto transmedia para hablar de la depresión como una epidemia invisible.

María Antonia Calle

María Antonia Calle

Hablo de economía y tecnología en Noticias Caracol. Amo los corazones mexicanos, las agendas con stickers y tomar vino mientras veo una película. Cuando la ansiedad me persigue, escribo en mi diario.

Juliana Munera

Juliana Munera

Estudio psicología. Me gusta escuchar y estar para los demás, entre mis amigas soy siempre "la mano derecha". Cuando tengo ganas de llorar, me lo permito, toda emoción es válida.

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Atenta-mente es un proyecto periodístico transmedia, hace parte del énfasis en Periodismo Digital de la Universidad EAFIT.

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