Soy una de las 4217 

quebradas

que recorren la ciudad, e integro la cuenca más grande de Medellín, la de El Poblado. Tributo mis agua al río junto a 55 afluentes más.

 

¿Te animás a navegar por mi cauce?

Me canalizaron y me cambiaron la vida…

Medellín ha cambiado mucho y yo he cambiado con él. En un principio mis aguas corrían libres, pero, a medida que la ciudad se urbanizó, me tuvieron que canalizar en algunas partes, pues se cree que mi paso natural puede ser un impedimento para las personas que hoy viven a mi alrededor. Mis  hermanas y yo nos hemos adaptado a toda esta nueva realidad.

 

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La Volcana es un corredor natural de fauna y flora, el hábitat de numerosas especies.

Las especies que me habitan…

¿Te cuento una historia? El Poblado es una comuna que posee una alta diversidad de especies, varias de ellas originarias del lugar. Tené presente que en los más de 70 Kilómetros de quebradas que recorren la zona, no solo se establece la mayor longitud de cuerpos de agua de la ciudad, sino también el hábitat de numerosas especies de animales silvestres que residen entre las urbanizaciones que están en mis orillas . Muchos fueron los primeros habitantes de la comuna y han ido adaptándose a la llegada de construcciones, ruidos y las luces  que provocan la actividad humana. ¡Jum, una tristeza!

 

La Volcana y demás quebradas del sector son visitadas por múltiples mamíferos, aves e invertebrados. Entre estos se encuentran aproximadamente 250 especies distintas de aves: las comunes guacamayas,loras, pericos 6 tipos de colibríes, una gran variedad de tanagras, 4 especies de pájaros carpinteros, garzas nocturnas, bichofués, mayos, azulejos y tórtolas. En las laderas de las quebradas podemos encontrar a la guacharaca, una especie endémica de Colombia.

 

Los animales suelen movilizarse por el cauce de las quebradas para obtener alimento y refugio. La diversidad de La Volcana es más grande en los tramos dónde no está intervenida.

En los lechos de las quebradas se pueden hallar ranas de lluvia, ranas de cristal, rana cohete, rana de charca y rana de chocolate, además de salamandras y lagartos. También algunas especies de serpientes como: la rabo de aí, la juetiadora, la falsa mapaná, la falsa coral y la tierra.

La chucha de agua es un marsupial el cual ha sido visto recurrentemente por la comunidad de El Poblado. Está y muchas otras especies utilizan la poca vegetación, asociada al cauce de La Volcana, como un corredor y se han encontrado registros en la zona urbana por dónde pasa la quebrada por ejemplo: En enero del 2022 fue encontrada una chucha de agua en cercanías al bloque 29 de la universidad EAFIT, también se ha tenido registro de un zorro perro el cuál fue captado por las cámaras de la cafetería de esta universidad.

 

La salud de La Volcana y demás quebradas es pieza clave para el bienestar de estas especies,  tanto para los grupos de insectos como los mamíferos. Si esta afluente fuese poseedora de un hábitat más natural, en ella se podrían encontrar una gran diversidad de microorganismos y hongos que ayudarían a la preservación de sus aguas, pero debido a la canalización y encerramiento de la misma la presencia de estos microorganismos es nula, la falta de luz natural e impermeabilización de su cauce impiden que La Volcana pueda mantener sus aguas limpias, además de factores externos como vertimientos de aguas negras y otros desechos.

La principal causa de contaminación en la quebrada La Volcana es el vertimiento de aguas negras.

Me siento enferma…

Mi relación con los humanos es un poquito compleja. Como te he contado en un principio, mis aguas eran limpias y había inconvenientes, pero a medida de que pasaron los años y todos estos edificios me empezaron a rodear, me fui ensuciando cada día más. Los humanos me arrojan desechos de todo tipo que tiene consecuencias negativas para mí.

¡Aquí te cuento mi historia!

El crecimiento urbanístico, la impermeabilización del suelo y la ocupación del cauce y su retiro aumentan los riesgos de desbordamiento en La Volcana.

¡Auxilio!, me desbordo…

Mirá que mis aguas a veces se suben mucho y me desbordo. Es que estas lluvias de Medellín son tenaces, pero esto no ocurría mucho antes, como ya sabés. Pero hay un tema que me tiene muy preocupada: el cambio climático, pues está el riesgo de desbordarme y complicar un poquito las cosas con las personas que habitan a mi alrededor.

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La Volcana ha acompañado al campus eafitense desde su construcción.

Hasta aquí nos trajo el agua…

¿Te gustó este recorrido? A mí me encantó. Yo sí espero que me sigás cuidando, y que cuando nos encontremos nos podamos saludar en este cauce, en el que la vida resurge a pesar de tantas dificultades.

Hasta la próxima pues…

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