Con el agua hasta el cuello
Nuestro planeta está cambiando a una velocidad sin precedentes. El cambio climático ya está aquí y es el responsable de una serie de transformaciones y adaptaciones que tendremos que asumir como sociedad para mantenernos a flote. La implementación de medidas que ayuden a mejorar el diseño urbano es clave para llevar esta transición hacia una sociedad que conviva en armonía con su entorno natural.
Por: Luis Alejandro Murillo Mena
Medellín, la ciudad de la eterna primavera, mantiene su título solo por tradición. El invierno o la temporada de lluvias de este 2022 parece interminable, inclusive desde hace algunos años no se vive lo de décadas atrás, cuando cada época tenía o una temporada seca o una temporada lluviosa. Muchos extrañan el calor y los días soleados, mientras que otros prefieren lucir sus outfits de invierno en las mañanas frías. Pero ¿a qué se debe este cambio? Leonel Torres, arquitecto y experto en el manejo de aguas lluvias, responde algunas preguntas que permitirán un mejor entendimiento de las dinámicas ambientales y su repercusión en la vida urbana.
Se ha comentado que actualmente en Medellín llueve en dos horas lo que antes llovía en dos días, ¿a qué cree que se deba este aumento de las lluvias en la ciudad?
Las ciudades especialmente tienen un estrés alto para poder afrontar este tipo de situaciones derivadas del cambio climático. Este, por ejemplo, produce una alteración en la variabilidad de agua en el territorio así que no está relacionado tanto con la escasez de agua en una cuenca o en un territorio sino a que no se encuentre en la cantidad y calidad que se solía encontrar antes que se generara esta situación de transformación ambiental. Los fenómenos donde hay más lluvias torrenciales pasan en Medellín y en otras ciudades.
En noticieros se ve que en Europa se está atravesando por grandes sequías (de las más severas que han tenido en muchos años), sin embargo, en el transcurso de estas dos semanas está empezando a llover otra vez y lo que solían ser las lluvias de todo el mes, e incluso de todo el verano, ahora cae en una sola llovida, lo que conlleva a inundaciones como las de septiembre en ciudades de Italia. Esto es un fruto evidente de las transformaciones que hay a nivel climático en todo el mundo.
¿Cómo funcionan las dinámicas del cambio climático?
La cantidad de agua que hay en el planeta no va a cambiar, siempre será la misma desde el momento en el que se creó hasta ahora. El tema es que las sequías y las lluvias se van a presentar de manera distinta a lo que estábamos acostumbrados. Cuando se habla de escasez de agua no significa que no vaya a haber agua en el planeta, significa que la sociedad no va a tener la cantidad y calidad de agua que requiere en un momento dado.
¿Qué clase de riesgos podrías traer para la ciudad?
Puede que se acentúen los regímenes de lluvia y de verano en la ciudad, y cuando sea época de lluvia normal, ya no se presente de una manera normal como toda la vida, sino como unos torrenciales que pongan mucho más a prueba las infraestructuras de la ciudad para le gestión de agua y en épocas de verano las sequías sean más largas o duras. Entonces, igualmente, pondrá a prueba la gestión de agua en la ciudad.
¿Qué tipo de problemas con el agua lluvia detecta en la actualidad y cuál sería la manera más conveniente de resolverlos?
Cuando hablamos de gestión de aguas lluvias hay una gran escala de cómo analizar el problema. En términos de diseño de desarrollo urbano se ha evidenciado que los criterios con los que se diseñan los espacios públicos en las ciudades no son los adecuados para la forma en la que se comporta el agua en el territorio.
Un fenómeno muy estudiado es el de las ciudades que al usar coberturas impermeables generan unas escorrentías muy severas. Esto lleva a que el caudal aumente en volumen y velocidad, lo que genera problemas en todas las escalas como los arroyos en Barranquilla, que son avenidas de agua muy rápidas y grandes en un periodo corto y va generando problemas en pequeñas y grandes escalas, como los puede tener Turquía en Estambul o México en Ciudad de México, que con la falta de capacidad de recuperación del agua subterránea, la
ciudad está descendiendo, hay sectores que se están inundando y que se hunden 20-30 centímetros al año. Así mismo, Estambul se hunde a una tasa de 4 milímetros al año por la incapacidad que hay del suelo de volver a alimentarse de agua, por lo que este va cediendo y va cayendo sobre lo que antes estaba ocupado por agua subterránea.
¿Qué adecuación en la infraestructura de la ciudad debería implementarse para evitar accidentes con las quebradas?
En términos de planificación urbana está muy claro que se debe empezar a abrir la mente y entender el río no solamente como un elemento de agua sino como la cuenca completa como tal. O sea, el río no es solo el curso de agua visible, sino que es una cantidad de dinámicas que existen en el territorio, es el balance hídrico (la cantidad de agua que entra en un territorio y la cantidad de agua que sale y en qué condiciones) que hay, que la escorrentía se genera en cualquier punto de la cuenca. Estas son las dinámicas propias del río. Este mismo se mueve sobre el territorio, tal vez el que no esté muy relacionado con el tema pensará que el río es una línea, un curso de agua que permanece constante con el mismo cauce durante años y esto no es verdad. El río va cambiando, de dirección,dependiendo de muchas afectaciones que puede tener en su curso.
La planificación del territorio empieza a entender que es importante analizar el problema desde la complejidad, o sea, desde entender las múltiples interacciones que hay en él. Ese trabajo ya se hace en muchos contextos, como por ejemplo la directiva marco del agua en Europa es una ley comunitaria que todos los países de la Unión Europea tienen que cumplir para minimizar los problemas que puedan ocasionarse por el mal manejo que se ha hecho de las cuencas.
Lo que se busca es que haya una manera en que las ciudades y el manejo del territorio puedan dialogar en una forma más amable con el comportamiento del río. Antes era muy común que en Colombia se canalizaran los ríos porque las necesidades de desarrollo así lo dictaban para así ocupar cada vez más territorio, entonces tratamos de contener algo que por naturaleza es un elemento vivo que se mueve. Esto agrava todas las problemáticas que ya se están presentando.
¿Qué recomendaciones podrían ser útiles para este período de lluvias?
A mantener el balance hídrico del territorio en la forma más cercana al balance hídrico natural (si no hubiera fenómenos de urbanización).En un territorio no urbanizado, la vegetación es capaz de retener agua en sus raíces y hojas, y la libera en forma de respiración. Manejar entonces una mayor cantidad de área permeable dentro del diseño urbano que permita la infiltración de agua, potenciar la revitalización, poder darle espacio a los cursos de agua para que puedan recorrer mucho más naturalmente como está acostumbrados a hacerlo, reservar sus áreas de inundación y permitir la “lemunación” del agua (la capacidad que tiene el mismo territorio de disipar la energía) en su recorrido, que el agua inunde de una manera lenta y pausada y no como normalmente ocurre en el desbordamiento de un cauce que va arrastrando vehículos, carros y personas.
Los cambios ya empezaron y el proceso de transición es inminente, la adaptabilidad y la resiliencia de las ciudades será fundamental para el óptimo desarrollo de nuestra sociedad, se debe respetar el balance hídrico y tratar de no modificarlo en exceso, hay que ser conscientes de que cualquier afectación del territorio genera consecuencias que son poco previsibles. Convivir de manera saludable con nuestro entorno es el paso que estamos obligados a dar.