Un jazzista

sumergido en los sonidos electrónicos

Autor:  Santiago Gordon.

Marzo 20, 2021

 
 
 
 
 
El jazzista Juan lopez explora los sonidos electrónicos que le han sido tan esquivos

Juan López, músico de sesión desde joven. Bajista y guitarrista –si se quiere ser específicos–. Sirvió de apoyo en proyectos musicales como Jet Nebula y Rosa Rosso, también de la orquesta de música tradicional México luz y color.

Es amante del jazz y del blues. De Miles Davis, John Coltrane, Charles Mingus y Jaco Pastorius.  Ha estudiado cada uno de los referentes clásicos. Escuchado cada uno de los álbumes que construyeron la escena y leído cada biografía y libro histórico que se ha cruzado. Considera que el jazz le permite expresarse de formas que otros géneros y medios jamás le hubieran permitido.

Para él lo más atrayente de la música está en su variedad. Siempre hay algo para alguien. Siempre hay algo nuevo por descubrir. Un constante aprendizaje.

Por eso, cuando le propusimos hacer un recorrido por el género, se sintió intrigado. Juan jamás ha escuchado electrónica de forma activa. Si mucho, lo que conoce de ella viene de bares y clubes donde se utiliza para ambientar el lugar. Considera este un buen ejercicio. Reconocer sonidos, instrumentos y técnicas utilizados de formas distintas a las que está acostumbrado.

Nos reunimos en su casa a las 9 de la noche. Su cuarto estaba lleno de vinilos, tocadiscos, amplificadores e instrumentos. Era el lugar perfecto para sentir la música. Consideramos que lo más importante era darle una idea de la electrónica mundial y una muestra de la escena medellinense.

Conectamos el amplificador al computador y empezamos a reproducir una de las playlist que preparamos para él.

Siempre, durante todo el ejercicio, mantuvo la concentración en el amplificador. Era como si lo estuviese estudiando. No solo con el oído, sino también con la vista. Sus comentarios y observaciones no se hicieron esperar.

Primero habló de la canción Suspiria, producida en 1977 para la película de terror del mismo nombre por la banda Goblin.

Suspiria //: Goblin

Sintió que le hizo ir de un estado de calma a uno de desesperación y ansiedad en cuestión de minutos. Ello producto de un muy serio y profesional trabajo de orquestación. Admiró también el nivel de experimentación de la canción. Que utiliza instrumentos poco convencionales en occidente, especialmente para la época. Tales como timbres, un sitar (instrumento de cuerda hindú) y el koto japonés.

Su siguiente parada llegó con la canción Cars de Gary Numan.

Cars //: Gary Numan

Reconoció lo que considera vendría a ser la estética sonora de los 80s. El uso del synth bass, el trabajo con osciladores y los envolventes acústicos (los cuales permiten modificar la duración de una onda de sonido dentro de la canción). Elementos que serían comunes en bandas de talla mundial como Depeche Mode. Notó la clara importancia del género para lo que considera una de las épocas más importantes en la historia musical.

Pero fue gracias a la artista de italodisco Clio y la banda inglesa de new wave New Order, que identificó el claro perfil comercial de la electrónica. 

Faces //: Clio

Temptation //: New Order

Es un sonido que se ha escuchado miles de veces en miles de lugares. Bares, clubes y estaciones de radio. Y es claro el por qué. Es imposible escuchar esta música sin mover una parte de tu cuerpo. Evocan una reacción física de la cual no se puede escapar.

Con la siguiente tanda de artistas, Moby, LCD Soundsystem y Fatboy Slim. 

Porcelain //: Moby

Dance Yrself Clean //: LCD Soundsystem

Right Here Right Now //: Fatboy Slim

 Sintió un cambio muy palpable. Los consideró su parte favorita de lo escuchado hasta el momento. Pues reconoció el nivel de exploración y creatividad que contienen sus producciones a la hora de utilizar sonidos que no se encuentran en instrumentos convencionales. Admitió que no logra reconocer su origen. Que podrían venir de cualquier cosa. Desde una caneca de basura hasta una botella de vidrio. Admiró el hecho de que son producciones mucho más complejas. En especial en el aspecto compositivo. Donde los artistas le dan una mayor importancia a la melodía.

Al terminar la primera parte del ejercicio habiendo escuchado, lo que consideramos, es una clara muestra de lo que el género tiene para ofrecer, sin ser todo lo que existe de él, claro está, le preguntamos sobre su reflexión final. Su respuesta fue bastante humilde y apreciativa.

“Una vez te tomas el tiempo de escuchar detenidamente estos artistas te das cuenta de que son sonidos y conceptos que ya has visto antes de alguna forma. Sientes que siempre estuvieron allí. Pero escuchar a quienes los hicieron posibles trae una nueva perspectiva sobre la mesa. Llena de respeto y aprecio a sus orígenes”.

Consideramos que para ese punto Juan ya tenía una clara idea de lo que ha sido la electrónica en el mundo. Desde la cual podría comparar o analizar lo que se realiza en la ciudad. Le preguntamos si le gustaría escuchar un poco de la creciente escena de la producción electrónica local. Por supuesto le llamó la atención.

Escuchamos a varios artistas. Unos más consolidados que otros. Verraco, DJ Pai, Rainmaker y Bitter Babe. 

Verraco //: 10Concecuences Of The Fall Of The Internet

DJ Pai //: Cómo Olvidarla

Zenith //: Rainmaker

SMS_229-305 //: Bitter babe x Nick León

Perreo, technoambientminimal synth. Fue la primera vez en toda la sesión de escucha que no detuvo ninguna de las canciones para  dar su opinión. Solo escuchaba.

Esperó un rato antes de dar su apreciación sobre la última parte del ejercicio.

El motivo por el que basó su carrera en México es debido a que, antes de partir, la escena musical colombiana no eran lo suficientemente apoyada para florecer y ser reconocida de manera internacional como sí lo ha sido en otros países latinoamericanos. Por lo que el que artistas colombianos estén mostrando la iniciativa de crear su propia música, basada en sus raíces, apoyándose entre ellos, lo considera de admirar. Fue lo primero que le llamó la atención.

Si bien aún hace falta mucho trabajo para salir del  underground, encuentra admirable que se está empezando a madurar la escena musical de la ciudad. teniendo no solo proyectos, sino también comportamientos más profesionales de los que eran apreciables hace unos cinco o seis años atrás.

“Por lo que escucho. Hoy en día el ser un artista serio en la música, en Colombia, es cada vez menos la idea loca de una persona joven que quiere buscarse una vía alternativa para poder vivir feliz”.

Aprecia que los músicos de la ciudad, sin dejar de respetar sus orígenes sonoros, no estén asustados de explorar nuevas formas de incorporar sonidos propios. Esto sin perder de vista el género al que pertenecen.

Siente que hay una comunidad que está forjándose un carácter y una personalidad clara producto de su ambiente y de su público. Si bien son underground en el momento, poco conocidos para el público mainstream. Se están tomando la responsabilidad que tienen como artistas en serio. desarrollando nuevas ideas y constantemente explorando nuevos sonidos y proyectos. Una muestra clara de que hay unos cimientos en los que están construyendo algo firme. Una escena en Medellín de la cual se puede hablar. De la cual se puede escribir. De la cual podemos sentirnos orgullosos.

Dando fin al ejercicio, hablamos por unas cuantas horas sobre estudio, trabajo y amigos. Sobre cosas ajenas al tema por el que nos reunimos. Cuando llegó el momento de despedirnos, Juan lanzó una pregunta que me sorprendió y que incluso nos hizo sentir alegres

¿Cuándo es el próximo toque?