Desmitificando el fitness virtual

Con el entrenador Santiago Valencia

“La palabra fitness tiene muchas connotaciones y ha sido mal utilizada en el día a día, debido al interés del marketing por posicionar determinadas marcas, entonces, una persona que hace ejercicio, que vende un producto o que está posicionando cualquier emprendimiento lo llama fitness, y se desvirtúa como tal la palabra, ya que en ese sentido, el término se puede referir a un quemador o una persona que hace cualquier actividad física; pero que no lleva una vida adecuada en otros aspectos”. Las palabras del entrenador Santiago Valencia se relacionan con el uso descontextualizado de la palabra fitness en la actualidad, sobre todo en las esferas virtuales, donde se tejen mitos de una “moda fitness”, que abarca la preparación de recetas saludables, la venta de suplementos deportivos y artículos sin gluten, calorías o azúcar y los creadores de contenido que suben sus rutinas sin ser expertos en el tema.

Desde hace trece años, Santiago Valencia inició su recorrido en el mundo del ejercicio por temas de salud y estética, con solo 16 años decidió cambiar su condición física sin saber que más adelante se convertiría en el guía de muchas personas que desean una transformación a través del deporte. Fue un gimnasio el lugar donde descubrió su pasión y en los entrenadores una voz de motivación y conocimiento que lo inspiraron en su carrera profesional. Valencia cursó estudios de educación física en la Universidad San Buenaventura. Después se enfrentó a su primer dilema: ser profesor o entrenador personal, su elección fue encaminada hacia la segunda opción; sin embargo, como entrenador también ejerce de pedagogo: enseña técnicas, corrige posturas inadecuadas y guía los ejercicios correctos para activar los diferentes músculos del cuerpo, incluso sus “estudiantes” lo llaman profe.

El coach Valencia se ha convertido en una autoridad en el tema del entrenamiento, cuenta con certificaciones de la NSCA, entidad española reconocida mundialmente en el campo del deporte, por lo que desde sus conocimientos desvela el significado correcto de la palabra fitness: “En esta cultura se tiene en cuenta la salud, la estética y el bienestar como premisas, una persona fitness es quien encuentra en su estilo de vida hábitos saludables: entrenar adecuadamente, llevar un plan nutricional según sus objetivos, sin llevar su cuerpo al límite. Comúnmente prevalece la estética sobre la salud, las personas hacen dietas restrictivas, toman suplementos nocivos. Un estilo de vida sano, además del ejercicio y la alimentación, conlleva dormir bien, evitar consumir licor y otro tipo de sustancias nocivas”. En definitiva, el fitness no es una moda, sino un estilo de vida.

Por otra parte, a raíz del aislamiento social obligatorio causado por el nuevo coronavirus (COVID-19), las dinámicas se han transformado y los contenidos en redes sociales o plataformas digitales sobre ejercicio aumentaron considerablemente, un claro ejemplo es la cuenta de Rodrigo Garduño quien según el Heraldo: “a sus 42 años, es el fenómeno de las redes sociales. Diariamente hace clases virtuales a través de su cuenta de Instagram donde se mantienen conectadas más de 30 mil personas, quienes se unen para entrenar durante una hora de lunes a sábado. Actualmente el entrenador y creador de 54D es denominado como ‘The King of Fitness”; pero ¿es posible orientar un entrenamiento virtual a través de la pantalla? Santiago Valencia opina que es posible en la medida en que no se pierda el entrenamiento personalizado y la motivación por parte del entrenador y de su alumno, pues es un trabajo en equipo que requiere no perder el enfoque. Ahora bien, Valencia advierte que aunque es posible encontrar en YouTube rutinas para trabajar diferentes músculos, hay algo que no tienen en cuenta “estos gurú del fitness”, como las patologías y los niveles de entrenamiento de las personas que visualizan los vídeos, quienes pueden terminar lesionados al poner en práctica estas recomendaciones.

Entonces, sí es posible hacer entrenamiento virtual; sin embargo, lo que funciona para uno no es benéfico para todos. Por esto, Santiago viene desarrollando una aplicación llamada Fit-Tech, una idea de negocio surgida antes de la pandemia del COVID-19, la cual le permitió afrontar los ejercicios virtuales de una forma más normal, pues ya estaba familiarizado con el concepto. La aplicación brinda un modelo holístico de entrenamiento, donde intervienen la optimización deportiva y la alimentación. El usuario se registra y llena datos como su índice de grasa corporal, luego recibe una video llamada, donde se establecen objetivos a seguir. A partir de ahí, empieza un trabajo interdisciplinario entre el entrenador personal y un nutricionista para crear una rutina de acondicionamiento físico y una dieta adecuada. Es decir, el entrenamiento a través de una pantalla funciona, en mayor medida, si es orientado de acuerdo con las necesidades particulares de un individuo.

La manera en que Valencia aborda el fitness virtual es diferente a la de muchos creadores de contenido. Dado que es un experto en el acondicionamiento físico, centra su contenido en enseñar: “El contenido que ofrezco como entrenador personal está ligado a ofrecer rutinas que se puedan realizar de forma didáctica en la casa o en el gimnasio, sin que se pierda el enfoque del conocimiento, es decir, enseñar algo, cuando hablo de enseñar algo me refiero a qué beneficios me da ese ejercicio, cuál es la manera incorrecta de hacerlo, qué lesiones se pueden generar o qué músculos se activan… también, ofrezco contenidos sobre cómo mejorar lesiones y sobre todo comparto conocimiento motivacional”. 

Sin lugar a dudas, Santiago representa el profesionalismo y la responsabilidad con su contenido, el cual comparte en Instagram, una red con mucha recepción entre la población por su accesibilidad a los en vivo, así como contenidos de recetas y rutinas.

El crecimiento en el gremio del fitness ha aumentado durante el aislamiento social, porque las personas tienen más tiempo, asimismo, el exceso de información generado por las redes sociales ha permitido el progreso de diferentes marcas e influenciadores dedicados a este mundo. No obstante, hay personas que creen que en los ambientes virtuales no se obtienen los mismos resultados que en el gimnasio. Santiago es claro al respecto: “La clave para obtener resultados es la misma virtual o presencialmente, tener un entrenador con los conocimientos necesarios para distribuir la intensidad, clases de entrenamiento y repeticiones. El concepto es el mismo, aunque con ciertos limitantes como el espacio y los materiales. Es ahí donde el entrenador va a tener más retos, al enfrentar estas carencias y crear estrategias ligadas a la funcionalidad y ser más creativo con los implementos”. Se desvirtúa otro mito sobre el fitness virtual, los resultados son posibles si el entrenador tiene las habilidades para idear un plan de ejercicio con los elementos disponibles.

Las recomendaciones de Santiago Valencia para ejecutar métodos deportivos en la era digital se enfocan en el correcto asesoramiento, porque el proceso pertinente es ir de menos a más, sin sobrepasar los límites físicos y generar lesiones; por eso, el trabajo del entrenador es primordial, ya que es el encargado de planificar una rutina coherente con las necesidades del usuario. Por esta razón, Valencia es partidario del entrenamiento funcional y aclara que no se trata de “tomar unos elásticos y realizar cualquier cantidad de movimientos”, como lo piensan muchos, sino de adaptarse a la vida cotidiana y laboral de las personas; es decir, en función de lo que un sujeto necesita. En el ejercicio funcional se trabaja con TRX, pesas rusas, bandas elásticas y varios elementos más; es ahí donde la funcionalidad aplica, pues los materiales dependen de lo que se va trabajar como aumentar fuerza y resistencia o mejorar la flexibilidad.