A dos semanas de reencontrarnos, creo que se me harán eternos los días. Y más que estos días tan nublados y fríos que están haciendo en toda la ciudad son apenas para estar en plan de ver series y películas. ¡Y si vi la película! Solo cerré los ojos 5 minutos, pero te tengo varias recomendaciones que sé que amarás.  

Fueron unos datos extremadamente valiosos y aprendí un montón, también José nos regaló su libro para que lo mires, sé que te gustará. ¿¡Un colchón?! No, no he visto ninguno y he pasado días enteros en la quebrada, pero sí hemos visto muchos pares de zapatos, latas de cervezas, botellas de guaro e, incluso, pelotas de tenis. ¡Qué triste!   

Sabes que la biodiversidad es uno de los temas que más nos apasiona, y como dices, “esta se ha visto gravemente afectada”. Se ha visto damnificada gravemente por la construcción de edificios, casas y calles. En el libro que Rincón nos regaló se ven las especies que habitan en las quebradas a pesar de la invasión a su territorio, pero como te mencioné en la carta pasada, son organismos muy pequeños que son imposibles de ver. Tenemos que crear un balance equitativo donde podamos subsistir con la biodiversidad que nos rodea.  

Qué increíble es saber que existen entidades que han diseñado planes específicos para ayudar a nuestros recursos hídricos. Deberíamos buscar la forma de unirnos con ellos y ofrecer nuestra ayuda en la conservación, cuidado y prevención de la calidad del agua, su fauna y flora. De seguro les servirá unas manos extra.  

No estás enredada, es así como dices. Y no solo está el convenio Nuestro Río, que ayuda inmensamente a la contaminación de los afluentes. Existe también el Plan Quebradas del Valle del Aburrá, que tiene como fin el mejoramiento ambiental, ecológico y paisajístico, buscando una ciudad más sostenible en una meta de diez años.  

También, te quería contar sobre mi última excursión con Esneider, el funcionario del Siata. ¡Hicimos algo súper chévere! Nos reunimos de nuevo en el caudal de la quebrada La Presidenta, por Vizcaya, y junto con un equipo especializado bajamos al cauce con un instrumento llamado correntómetro. Este aparato mide la velocidad y la profundidad permitiendo calcular el caudal. Este procedimiento se hace cada pocos meses para revisar el caudal mínimo promedio de la quebrada y así poder controlar y monitorear el cauce.   

¿Soñaste conmigo? Wow, hace ratico no tengo ese privilegio. Me hiciste reír con ese sueño tan extraño, pero imagínate hacerlo ¡Sería de locos!. ¿Qué regalo podría ser? Tal vez un bolso que te mostré la última vez que nos vimos … Sabes qué es jugando. Lo único que quiero recibir sí o sí cuando nos veamos es un abrazo rompe huesos.   

Será esperar entonces a nuestro reencuentro: extrañaré sentarme a escribirte cartas pero te confieso que me emociona no saber nada de ti hasta vernos. Estaré tan nerviosa como en nuestra primera cita.  

¡Has logrado un montón! Espero con ansias cuando nos podamos sentar a hablar y contarnos todas nuestras aventuras y logros. Yo también me siento muy orgullosa de lo que he logrado. Son horas y horas bajo el sol y la lluvia, de charlas y levantamiento de datos. Mi última tarea ahora es organizar todo el material obtenido y presentarlo al profe Darwin, espero que le guste y sea de utilidad.  

Tic, tac, tic, tac, no veo la hora de estar contigo, Zary, 

Amaya