La cara desconocida del mundo trans

Por: Santiago Morales Cano

 

Cuando se habla de una persona trans, automáticamente se piensa en qué problemas de infancia tuvo, qué maltratos pasó o si sufrió de algún abuso. Es de suma importancia hablar sobre lo que tiene que afrontar una familia al aceptar un hijo trans,y los procesos de aceptación no solo son para el individuo, la familia también los tiene que vivir, afrontar y superar. No todas las personas de la comunidad LGTBI vienen con una infancia quebrantada o de un ambiente maltratador, muchos tienen familias amorosas que los aceptan y los apoyan, pero como proceso, aceptar y vivir esta realidad toma tiempo y surgen situaciones que requieren de ayuda psicológica.

En esta entrevista, Paula Cárdenas, psicóloga de la Universidad San Buenaventura y especialista en estudios de género de la Universidad de Me ayuda a entender y analizar el reto de una familia que está afrontando la transformación de un hijo o una hija. Las preguntas indagan sobre el tema familiar, ya que lo que sufre un hijo trans, sus padres lo viven con él. 

Psicológicamente hablando, ¿cómo una familia afronta la decisión de un hijo de asumir su identidad trans?

Depende de muchos factores, hay familias que son de una apertura mental distinta que les permite comprender los cambios que se generan en sí mismos, en su familia y en el ambiente. Son personas que son capaces de adaptarse a los cambios, como hay personas que por su estructura de personalidad no les es fácil adaptarse, son rígidas y afrontar cambios en su cotidianidad es muy difícil. Si bien culturalmente este tema no es fácil asumirlo, porque todavía no estamos preparados lo suficiente para entender los procesos de identificación de género, identificación sexual y orientación sexual. Para una familia que sea rígida o inflexible a los cambios va a ser complejo aceptar que su hijo o su hija está haciendo una transición, porque descubrió que psicológicamente no está en el cuerpo que habita. 

¿Es verdad que para los familiares es como afrontar la muerte de un ser querido?

Pues sí, como te decía, hay familias con unas estructuras muy rígidas de preconcepciones o ideologías muy marcadas sobre el tema religioso, sobre la moral y sobre ideas o esquemas. Entonces, a las personas que tienen tan fortalecida su estructura, sí se genera un duelo, es si sintieran que la persona que siempre conocieron como su hijo, con quien siempre tuvieron una relación que se instauró desde pequeño, hubiese muerto. No quiero decir que al resto de familias no les pase, pero para algunos es más complejo, tienen que vivir cierto proceso de duelo, porque algunos incluso llegan a decir que sienten que su hijo o hija murió y que el que tienen al frente lo desconocen y es una falta de aceptación con una negación absoluta de lo que está sucediendo con ese miembro de la familia tan amado.

Usted dice que la religión y la moral pueden ser un impedimento para la aceptación dentro de la familia debido al nivel de creencia, ¿por qué la moral puede generar resistencia para llegar a la aceptación de los hijos e hijas trans?

El tema de la moral es entendido en términos de que hay familia que confunden la moral con el pudor, la sociedad y el “qué dirán”. Hay unos códigos que se confunden, entonces se limitan a entender el tema de los trans y de diversidad como inmoral, pero realmente es una interpretación que se hace al interior de estas familias., ya que moral no tendría por qué tocar estos temas. Una persona que decide ser trans o que lo descubrió tiene su moral intacta, no es inmoral, pero hay una interpretación social que lo hace ver así y hay unas familias que lo interpretan así, por eso hablo de la moral que es mal interpretada y la religión también tiene mucho que ver en esto, de tener un sesgo muy alto frente a estas condiciones de las personas.

¿Cómo se ayuda psicológicamente a los familiares a llevar este proceso? 

Sean o no familias comprensivas, rígidas, flexibles o no, pues sí es importante hacer un proceso de acompañamiento. En primer lugar, para que comprendan que su hijo o hija no se ha convertido en nada, solo que viene en un proceso de descubrimiento, porque existe una incongruencia entre lo que es y siente psicológicamente y lo que su cuerpo ha sido. Entonces está descubriendo su verdadera identidad de género, su identidad sexual y su orientación sexual. Ayudarlos a entender que no es una ninguna conversión ni una nueva versión, sino que es un proceso de descubrimiento. Y en segundo lugar, empezar a entender que necesitan acompañamiento para evitar por ejemplo temas de suicidio o la automedicación, para ayudarlos a afrontar todos esos cambios hormonales cuando se deciden a hacer una transición de sexo.

El proceso de aceptación no es solo para la persona trans, los familiares cercanos también tienen que llevar a cabo una aceptación y un proceso, ¿cómo lo pueden hacer? 

Definitivamente sí hay un proceso de aceptación sobre todo para aquellos padres que a han observado que su hijo o hija tienen unas inconformidades o unas incongruencias de quién es con su cuerpo biológico y su cuerpo psicológico. Para esos papás y esas familias sí tienen que hacer un proceso de aceptación como se hace en cualquier duelo, que tiene unas etapas: la negación, luego evitan el tema, pasan a la aceptación y hay un proceso de adaptación a la nueva situación. Todo en la vida es un proceso en donde si aceptan un acompañamiento se les va a facilitar mucho más, pero si no aceptan el acompañamiento a su modo, su manera y ritmo de alguna forma les toca aceptar.

“Una persona que decide ser trans o que lo descubrió tiene su moral intacta”.

¿Qué pasa por la cabeza de unos padres que no quieren aceptar ni ayudar a su hijo o hija en el proceso para convertirse en una persona trans? 

Digo condición, debido una “situación” es temporal, pero la “condición” es permanente, entonces esta nueva condición crea una crisis para muchos padres. ¿Qué pasa por la mente de ellos?, es imposible saberlo sin preguntárselo a las familias, pero te puedo decir que pasan frustraciones, negaciones, culpas: ¿qué hice mal?, ¿en qué fallé?, como si el proceso de su hijo o hija tuviera que ver con un tema de crianza, de algo que se hizo o se dejó de hacer y finalmente sabemos que no es así; es simplemente un proceso de descubrir quién es, de indagar por uno mismo qué pasa, qué vacíos tienen y si es congruente o no todo lo que esa persona es. Un sinfín de pensamientos que pasan por la mente de los padres según sea su postura frente a la vida.

¿Qué situaciones mentales afrontan unos padres a la hora de saber que su hijo quiere ser una persona trans? 

Son muchas, como te dije, desde la culpa propia hasta culpar al otro de que querer ser lo que es. Hay un tema muy interesante que propone la psicología y es el “locus de control interno” y el “locus de control externo”; cuando una persona, en este caso los padres de familia tienen un locus de control interno, pues van a tender a culpabilizarse a sí mismos, a renegar, a preguntarse, “¿por qué fallamos?”, “¿en qué proceso?”, “¿qué nos faltó?”, y a empezar a buscar situaciones que pudieron haber hecho que esta decisión de su hijo se diera y empiezan a buscar en el interior de ellos qué fue lo que pasó. Si hay una familia o unos padres que tienen un locus de control externo, empiezan a culpar a sus amigos, a los familiares externos, al colegio, a la misma persona que está tomando la decisión; o sea, todo está afuera menos en ellos.

¿Cuáles son los mayores miedos que afrontan los familiares al saber la decisión de su hijo de querer ser una persona trans? 

Bien interesante porque el miedo siempre está presente, sea que el padre acepte o no esta condición o esta nueva situación familiar. Con esta nueva decisión o descubrimiento siempre va a estar presente el miedo, como padres siempre va a haber un tema implícito que es la protección de su hijo. Entonces, hay unos temores que es el miedo al rechazo social, el miedo a que esté equivocado, a que pierda un trabajo, a que las amistades se vayan, a que el resto de familiares le den la espalda, a afrontar esto a nivel social, a que ya no sea el mismo hijo o hija que conoció desde pequeño, que haya una ruptura en la relación, etc.

¿Por que los padres sienten culpa de que su hijo sea transexual?

Ahora, cuando hay una situación de transición que incluye la reasignación de sexo (transexual), a diferencia del transgénero, que es transformar las construcciones sociales que se han hecho de ser hombre o mujer a mi propia construcción social, ahí hay otro aspecto todavía más complejo para la familia, donde la culpa se puede exacerbar muchísimo más, como “pero era solamente apariencia, ahora cómo así que se va a cortar el pene o reconstruir una vagina”, eso causa un trauma, como es casi que una mutilación o algo que no estaba ya va a estar ahí, eso genera también culpa frente a lo que está sucediendo en ese momento, los padres seguramente la transmitirán a sus hijos e hijos. Estos grados de culpa aumentan o disminuyen según la dinámica familiar.

¿Por qué existe la idea de que los trans generalmente provienen de familias disfuncionales donde se presentan abusos, maltrato físico y psicológico?

Debemos acudir a los antecedentes, en donde incluso desde la psicología ser homosexual, por ejemplo, era una enfermedad. De allí se han desprendido cantidad de teorizaciones y aunque desde esta misma disciplina y desde el punto de vista de la Organización Mundial de la Salud, ya no se concibe como tal, las resistencias sociales han sido muchas. Ahora bien, con mucha más vehemencia, las personas trans han cargado con el lastre cultural de que son fruto de familias enfermas o disfuncionales; sin embargo, el cuestionamiento que hay que hacer es: ¿cuántas de las familias de personas heterosexuales son disfuncionales y maltratadoras? Seguramente un gran porcentaje. Entonces, este pensamiento proviene de un prejuicio social en donde se quiere argumentar la “anormalidad”, a través de explicaciones poco fundamentadas. La diversidad y lo que se sale de lo heteronormativo siempre será visto como algo raro y se querrá ligar con explicaciones como esa. Cada vez más el mundo se abre a las diferentes posibilidades, pero aún falta mucho aprendizaje, incluyéndome a mí y al resto de personas que rodean a quienes valientemente han encontrado su congruencia: las personas trans.complejo para la familia, donde la culpa se puede exacerbar muchísimo más, como “pero era solamente apariencia, ahora cómo así que se va a cortar el pene o reconstruir una vagina”, eso causa un trauma, como es casi que una mutilación o algo que no estaba ya va a estar ahí, eso genera también culpa frente a lo que está sucediendo en ese momento, los padres seguramente la transmitirán a sus hijos e hijos. Estos grados de culpa aumentan o disminuyen según la dinámica familiar.

¿Cómo debería una persona trans llevar el proceso de contarle a su familia sus deseos para no generar un conflicto?

Frente a eso yo siento que la sinceridad y la claridad son la clave. Darle rodeos, de preparar, ponerle arandelas y postergar la situación lo único que hace es más daño del que ya una familia puede sentir con una noticia de estas, aunque eso no es absolutamente ningún daño, pero así lo preconcibe la familia en muchas ocasiones, entonces es simplemente la honestidad, la claridad de expresarlo como se lo expresaría a cualquier persona. 

A los seres humanos, en esta sociedad y cultura, nos han marcado mucho. ¿Cuándo una persona heterosexual tiene que sentarse a la mesa a decirle a su familia que es heterosexual? Eso no pasa, nadie habla de eso, porque es como si se presupusiera que todos somos heterosexuales. 

¿Qué pasos debe seguir un padre para soltar a su hijo o hija y comenzar a aceptar a esta nueva versión? 

Esta pregunta me lleva a pensar mucho en el planteamiento inicial. La persona no es que sea una nueva versión; no es que era Laura y la nueva versión es Pedro, porque seguramente siempre ha sido Pedro, está en un proceso de descubrimiento y realmente es él o ella la que está hablando y siempre lo ha sido. ¿Qué pasa?, que eso se va descubriendo, pues como socialmente nos han dicho unas cosas, no siempre es congruente. Inicialmente quiero hacer esa aclaración, que no es una nueva versión, sino que descubre su verdadero ser en todas las dimensiones.

¿Y los pasos a seguir? 

Pues no hay ningún paso establecido, yo diría que reciban el apoyo y el acompañamiento que los profesionales brindan para eso: para informarse, formarse; es muy importante la pedagogía, que comprendan que eso no es ser anormal, ni estar enfermo, ni ser raro, sino que es parte de las identidades que como seres humanos vamos adquiriendo, solo que hay unas identidades que me las imponen de pequeño y realmente eso no era; se descubre que es otra.

¿Alguna recomendación?

Que se dejen ayudar para que ellos como familia puedan acompañar a su hijo en este tránsito, si mi hijo o mi hija decide una transición, porque no se siente bien o no se siente congruente y decide emprender ese camino se hace muchísimo más difícil si mi familia no está conmigo, no me acompaña, no está preparada, no se informa, no se forma. Lo primero es prepararse como familia y como individuos para luego acompañar a esa persona y apoyarla en lo que decida, desde que eso no pase por encima de los derechos de los demás. Seguramente una decisión de esas o el proceso de emprender ese camino va a lastimar a personas, pero no les está vulnerando ningún derecho, la lastima por sus propios juicios. 

Experiencia Periodística Innovadora

Universidad EAFIT

Ana María Córdoba

Mariana Caicedo

Santiago Morales

Sara Ramírez

Valentina Mejía